Metafísica de la gracia

La consciencia implica tener gratitud por nuestra existencia; esto puede sonar como una cursilería, pero es posible analizarlo filosóficamente. La gratitud tiene un peso metafísico que está relacionado con el carácter existencial del hombre. Para empezar a explicar esto recordemos que a lo largo de la historia existieron pensadores que han sentido asco y horror de existir. Sartre, por ejemplo, en su libro “la náusea” nos muestra este horror.

El filósofo alemán Martin Heidegger también nos presenta reflexiones oscuras con respecto a la existencia. Nos plantea que hemos olvidado preguntarnos ¿por qué hay algo en lugar de nada? Él nos plantea que hacemos las cosas automáticamente, utiliza la forma impersonal “se dice” “se hace” “se es”. Dentro de la sociedad hacemos nuestra tal cual las cosas “se deben hacer” y en este modelo sentimos cierta comodidad. En este discurso ¿dónde queda la gracia?

Por el contrario, desde la perspectiva de otros pensadores analizar la existencia es bastante interesante. Descartes quería encontrar la certeza de verdad de todo aquello que conocía. Al pensar sobre esto llegó a la conclusión de que la materia de la realidad se divide en tres sustancias: res cogitans (cosa pensante) res extensa (la materia) y res divina (Dios o la divinidad). Más tarde, nos dice también que el cuerpo humano es como una máquina y al igual que varios los antiguos pensadores trata de hablar de la relación del cuerpo con el alma, indicando que dentro de nuestra sangre se encuentran los humores que caracterizan nuestra personalidad. Viéndolo de esta manera, existir parece algo fascinante. Pero parece que los pensadores contemporáneos se olvidan de este hecho; Jean-luc Marion retoma con fuerza las reflexiones sobre la gracia. Primero nos recuerda que Dios se encuentra en una distancia lejana que nos permite ser y permite también el lenguaje.

La metafísica es la rama de la filosofía que cuestiona a los entes en cuanto entes; el hombre es el que cuestiona; al hacer filosofía no deberíamos olvidar que el hombre sufre, ama, goza y es consciente de su finitud. La cuestión olvidada por la filosofía moderna no es la pregunta por el ser, es la cuestión de la gracia. Para Jean-luc Marion, la gracia es un don que desaparece en su darse y sólo quien sabe dar, puede recibir. Hasta ahora no había podido entender esto, pero me parece que si no sabemos ser agradecidos por nuestra existencia no seremos conscientes de este regalo. La existencia entraña una extraña belleza dentro de la naturaleza del existir. Nos brinda varias posibilidades:

1. La posibilidad de crear
2. la posibilidad de apreciar
3. la posibilidad de amar.

Crear y evolucionar son cosas que están relacionadas con el arte y la religión. Para mí, el sentido del arte radica en la salvación; salvación por muchos motivos, porque fuimos capaces de vivir una vida auténtica, de luchar por nuestros ideales, de realizar obras artísticas con nuestro trabajo y nuestra vida.

La capacidad de apreciar es valorada por Aristóteles, quien en su ética nos dice que la actividad más elevada que puede realizar un ser humano es la contemplación, esta actividad la realizan los gobernadores de la ciudad, quienes están libres de otras tareas y pueden dedicarse a este trabajo; con un poco de educación, cualquiera puede convertirse en un contemplador de la vida, sólo hace falta querer hacerlo, tener ganas de realizar la contemplación como actividad. 

En tercer lugar, el amor como actividad está relacionada con el arte porque crearemos aquello que amamos, crear es una actividad de amor a la existencia. Cada uno puede desarrollar la capacidad que tiene de volverse artista y amante. No hace falta estar en las esferas más altas, pues toda esfera se difumina cuando se analiza las características de la realidad con detenimiento. Entonces encontrar el centro de cada círculo será un trabajo de libertad y de valor, este como valentía, como fuerza y también como capacidad de apreciar para poder crear. 

Diana Galindo Barajas (1994)

Licenciada en Filosofía, por la UAQ, autora de Spiritual Kigdom, cuento (https://www.wattpad.com/864571406-spiritual-kingdom-prefacio 2014) y El mundo desde afuera, poesía (2019).