La filosofía metafísica de Juan Carlos Moreno Romo

Juan Carlos Moreno Romo es un profesor de filosofía de la Universidad Autónoma de Querétaro, doctor en Filosofía por la Universidad de Estrasburgo, que se especializa en la filosofía de Descartes. Su investigación abarca un contexto histórico y espiritual para la comprensión de la profundidad del pensamiento del filósofo francés René Descartes. Una de las cuestiones fundamentales en el pensamiento del francés es la cuestión del sueño. Una duda entre la realidad de la realidad y de lo que se sueña a tal punto que lleguen a confundirse, llevó al filósofo a una reflexión, a poner el mundo en duda y al sentimiento de la angustia.

Es con este antecedente, que el filósofo queretano, Moreno Romo, guía a sus alumnos por el sendero del pensamiento crítico, completo, que pueda acceder una perspectiva que últimamente ha sido atacada: la perspectiva de la fe. En sus clases, el profesor Juan Carlos Moreno rescata la importancia de los textos de algunos filósofos y pensadores españoles, así como de los místicos: Unamuno, Santa Teresa, Sor Juana Inés de la Cruz, son algunos de los autores que el profesor aborda en sus cursos, así como San Agustín y Duns Scoto.

El profesor mantiene un análisis de la modernidad, donde el nombre de uno de los seminarios permanentes que dirigió es el siguiente: Estudios Cruzados sobre la Modernidad.

Y aquí la cosa se pone interesante, porque un pensador que se dedicó a la investigación de un filósofo de la talla de Descartes, quien ha sido llamado el padre de la modernidad, por la invención del método científico, nos deja huellas de un pensamiento donde el sueño, el soñar, el reflexionar, el contemplar a los sueños es parte importante del corpus de su filosofía. 

Por un lado, si hablamos de una metafísica, es decir, una ontología que se pregunte por estatuto de la sustancia, del pensamiento y del sujeto cognoscente, la trascendencia que se pueda dar a los sueños como parte de la realidad cobra relevancia y podría ser que cambiaría nuestro panorama epistémico. En su obra, Vindicación del Cartesianismo radical, hay una cita en particular que me hizo mucho sentido y me recordó a los misterios eleusinos. En ella nos habla del camino espiritual de Descartes, de cómo fue muy importante un sueño que tuvo, donde había un viento que lo empujaba hacia la iglesia, y este sueño le ayudó a clarificar su camino espiritual y filosófico (remarca la formación en un colegio jesuita de Descartes); y señala una distinción que hace Freud en los sueños. Los sueños normales son simplemente Träume (sueños), mientras que los sueños con algún contenido intelectual, complejo, soñar que se lee por ejemplo son Hoch Tärume (sueños altos). Me parece interesante cómo es que se teje el sueño como evento (événement) que marca una dirección en su vida. Y es que en sus clases, el doctor Moreno Romo recomienda la lectura de “La vida es sueño” de Calderón de la Barca. Uno de los puntos que señala es la capacidad de elegir lo que es moralmente bueno a pesar de que estuviéramos hipotéticamente en un sueño. Es ahí donde se da el espacio de lo moral, con la noticia de Dostoievsky: si Dios no existiera, todo estaría permitido. En esta ontología y deontología mostrada en las clases del doctor Moreno, estamos frente a un mundo donde se confía en Dios, respaldado por la tradición del pensamiento donde es posible pensar racionalmente en la existencia de Dios, desde las reflexiones de Santo Tomás de Aquino, Descartes y que luego van hacia una mística reflexiva y contemplativa de Santa Teresa de Ávila, con la lectura, también recomendada por Unamuno, de Las moradas del alma.

El profesor también recalca la importancia del talante espiritual de los filósofos, que es fundamental para entender cómo hacemos filosofía, desde dónde y hacia qué sentido mira la misma. Una tarea que también el fenomenólogo alemán Husserl enfatizó como importante en su libro sobre la Crisis de las ciencias europeas y la fenomenología trascendental. Este pensador entra en este tejido de pensamiento de un talante de búsqueda de sentido, de pensamiento donde existe el Hambre de Dios (otro título de una obra del doctor Juan Carlos), un hambre espiritual que nos lleva a seguir buscando, a exaltar la dignidad del hombre, en su búsqueda por encontrar las preguntas y respuestas correctas, los diálogos donde la importancia del estudio de la religión como fundamento de una vida cultural sólida para el hombre es un derecho que es importante defender, yo lo llamaría el derecho a mirarnos como seres que contemplan el infinito.

Sobre el profesor Juan Carlos Moreno Romo 

Es, desde 2004, Doctor en Filosofía por la Universidad de Estrasburgo y, así mismo, Licenciado por la UNAM.

Ejerce como profesor investigador catedrático, impartiendo asignaturas del área de Filosofía moderna y contemporánea, en la Facultad de Filosofía de la Universidad Autónoma de Querétaro. Se ha reconocido, además, su labor docente gracias al trabajo como conferencista y profesor invitado que ha realizado a nivel nacional e internacional, en países como España, Francia, Colombia, Nicaragua, Haití y Canadá. Destaca también su trabajo de investigación, y su labor como interlocutor, sobre la reciente filosofía francesa; Philippe Lacoue-Labarthe, Jean-Luc Nancy, René Girard, Rémi Brague y Jean-Luc Marion, entre otros.

Entre sus publicaciones podemos mencionar Vindicación del cartesianismo radical, de 2010, Hambre de Dios. Entre la filosofía, cristianismo, y muestra díficil y frágil laicidad, de 2013, Filosofía del arrabal, de 2013, ¿Doscientos años de qué? O sobre nuestra ambigua relación con la Modernidad, con la filosofía y con las humanidades, de 2014, La religión de Descartes, de 2015, y El fin de la ciudad, de 2016, además de su labor de coordinación en obras como Descartes vivo, de 2007, Unamuno y nosotros, de 2011, Unamuno, moderno y antimoderno, de 2012, y Ortega pensador, de 2016.

Diana Galindo Barajas

Fotografía: Paola Ortega

Es licenciada en Filosofía por la Universidad Autónoma de Querétaro. Ha publicado los libros Despliegue de pájaros (Ediciones El Humo, 2012), Spiritual Kingdom (Ediciones El Humo, 2014), El mundo desde afuera (Ediciones El Humo, 2019), Elemento agua (Edición de Autor, 2020) y Las pasiones de la luz (Infame Turba, editorial). Su poesía está incluida en la antología Poesía en sí (ENSQ, 2015).

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